Los estándares eléctricos son la llave de acceso al comercio internacional a través de la eliminación de las barreras técnicas. El 90% de las normas UNE relacionadas con el sector eléctrico son europeas, mientras que el 75% son también internacionales, facilitando las exportaciones a las empresas del sector.
Aumentar su competitividad. Ese es uno de los principales retos de las empresas españolas y, para lograrlo, la normalización se convierte en una herramienta fundamental. Una llave de acceso a los mercados nacionales, europeos e internacionales para los productos y servicios de las empresas de todos los sectores, pero en el eléctrico de una forma significativa. El 90% de las normas UNE relacionadas con el sector eléctrico son europeas, mientras que el 75% son también internacionales, lo que favorece la internacionalización y el acceso a los mercados exteriores a las empresas españolas.
Gracias a la estandarización elaborada por la Asociación Española de Normalización, UNE, junto con los principales actores, se construyen mercados transparentes y globales, eliminando las barreras técnicas al comercio. Esto contribuye a incrementar la capacidad de comercio exterior y la internacionalización de las empresas españolas. De hecho, el 80% del comercio mundial está sujeto a normas técnicas.
Para ello, UNE actúa en tres niveles: el nacional, el europeo y el internacional. Como organismo nacional de normalización, UNE contribuye activamente a incrementar la capacidad de comercio exterior y la internacionalización de las empresas españolas. Como miembro de los organismos europeos de normalización, UNE facilita el acceso al mercado único europeo a través de los estándares. Como representación española en los organismos internacionales, ayuda a desarrollar normas técnicas internacionales que favorecen la eliminación de barreras técnicas al comercio y el acceso al mercado global.
En este sentido, UNE favorece el clima de negocios de las empresas españolas en países de destino de sus exportaciones, dando soporte al Plan de Acción 2017-2018 de la Estrategia de Internacionalización de la Economía Española. Las normas recogen el consenso del mercado sobre las mejores prácticas en aspectos clave para la competitividad de las organizaciones, siendo el resultado de la labor conjunta de los sectores económicos y Administraciones.
Acceso universal a la electricidad gracias a la normalización
Las normas técnicas desarrolladas por UNE en materia de Baja Tensión y Corriente Continua (LVDC) para el acceso a la electricidad, son un claro ejemplo de cómo los estándares eléctricos abren mercados y ayudan al desarrollo de un sector como es el eléctrico.
En este caso, UNE promueve la participación de expertos españoles en el Comité Internacional de IEC SyC LVDC, Corriente continua de baja tensión para el acceso a la electricidad, cuyos objetivos están centrados tanto en economías desarrolladas como en países de desarrollo.
En el primero de los casos, los estándares internacionales proporcionarán la base técnica necesaria para que los fabricantes puedan desarrollar productos de corriente continua seguros y sirven de guía para los instaladores de este tipo de sistemas. Además, gracias a las normas relacionadas con LVDC, se contribuye a mejorar la eficiencia energética, a reducir la huella de carbono y a la utilización directa de gran cantidad de energía sin pérdidas en su conversión.
Para los países en desarrollo, los estándares eléctricos son fundamentales para el acceso a la electricidad que permita el desarrollo inclusivo de todas las comunidades.
En ambos casos las normas internacionales facilitan el amplio despliegue y aplicación de las tecnologías LVDC, lo que acelera su comercialización y abre nuevos mercados para la industria española.
Una gran ayuda para conseguir los ODS
Las normas UNE relacionadas con el sector eléctrico facilitan a las organizaciones la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), ya que proporcionan un lenguaje común y criterios medibles, basados en el conocimiento, consenso y colaboración que requiere este reto global.
Así los estándares eléctricos contribuyen a lograr la gran mayoría de ODS, siendo el más importante el ODS 7 sobre energía asequible y no contaminante.